El canciller de Paraguay brindó un escueto informe sobre las últimas negociaciones con Argentina en lo que respecta a los reclamos en la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) Aseguró que hubo “avances” pero finalmente casi todo quedó en la “buena predisposición” del vecino país.
Eladio Loizaga se reunió hoy martes con el presidente de la República, Horacio Cartes, en Palacio de Gobierno, ocasión en que le informó sobre los avances obtenidos en la última reunión entre autoridades paraguayas y argentinas, en Buenos Aires.
En la víspera, el encuentro en el vecino país terminó con un “pacto de silencio”. Los referentes nacionales se limitaron a señalar que primeramente deben informar al mandatario sobre las cuestiones alcanzadas. Al respecto, el canciller insistió en la fecha en que “hay que entender que en cualquier parte del mundo el jefe de Estado es el primero en ser informado sobre cuestiones de política exterior y luego se informa de los hechos a la opinión pública”.
El ministro aseguró que hubo “importantes avances”, aunque a la hora de detallar esos puntos indicó que se logró “el reconocimiento de ambas partes de que la entidad debe ser sostenible en el tiempo y debe ser financieramente viable”. Igualmente, comentó que se decidió encargar a un equipo técnico “que siga trabajando en lo que Paraguay ha señalado, de tal modo a que podamos ir encontrando aquellos puntos de coincidencia”.
A pesar de que el diálogo entre las partes arrancó hace tres meses y de no lograrse aún grandes progresos visibles, el canciller insistió en que “esto es un avance”. Posteriormente, Loizaga se limitó a repetir la posición del Gobierno paraguayo, respecto a que no habrá avances en obras -como la maquinización del brazo Aña Cua- mientras no se resuelva la deuda de Yacyretá. “El Presidente es claro: la instrucción es arreglar la deuda para luego seguir con otros proyectos”, aseveró en rueda de prensa al retirarse de la sede gubernamental.
Al ser abordado sobre una estimación de tiempo para lograr un acuerdo al respecto, se limitó a señalar que no puede establecerse un plazo, pero insistió en que “hay apertura”.
El Gobierno paraguayo no reconoce la deuda generada por la construcción de la represa Yacyretá, ya que los fondos fueron puestos por la Argentina en calidad de aportes. Sin embargo, el monto fue generando intereses hasta llegar a los US$ 16.908 millones. Del total, US$ 11.362 corresponden a ajustes e intereses generados. De esta manera, se deduce que el aporte del Tesoro argentino para el emprendimiento ronda los US$ 5.000 millones.
Loizaga reiteró que actualmente “hay buen diálogo con ellos y creo que debemos llegar a un arreglo histórico atendiendo a los intereses nacionales”. Recordó que esta no es la primera vez que se intenta un acuerdo en lo que respecta a la deuda de la EBY. “Esperemos que esta vez sí podamos llegar a un acuerdo”, manifestó.
La renegociación del Anexo C del Tratado de Yacyretá se inició en junio pasado, tras cumplirse 40 años de su entrada en vigencia. La primera conversación tuvo lugar en la misma sede de la binacional. Al término de cada encuentro y ante las consultas, las autoridades paraguayas insisten en destacar la «buena predisposición» de la Argentina como el avance en el diálogo.
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