El Senado otorgó media sanción con modificaciones al proyecto de ley de protección integral a la mujer contra todo tipo de violencia, eliminando la palabra “género”, considerada ambigua. Se añadió la figura del feminicidio, con sanciones que podrían ir de 10 a 30 años para el agresor.
El proyecto de ley conocido como #PorEllas había sido aprobado en forma general el jueves de la semana pasada. Ayer, tras un prolongado debate, que fue seguido por sectores que están a favor y en contra, el plenario aprobó la iniciativa, luego del análisis de cada uno de sus artículos. Ante esta decisión, la propuesta vuelve a la Cámara de Diputados.
La novedad de la normativa es la introducción de la figura del feminicidio, y la tipificación de las diferentes formas de violencia contra la mujer. Además, establece las garantías integrales, para que las mujeres puedan sentirse segura y en paz, igualmente su entorno. Así como las normas y sanciones contra el acoso por parte del hombre.
El principal cuestionamiento, sobre todo de los miembros de la comisión de Equidad y Género, que peticionaba la aprobación del texto que ellos elaboraron, tenía que ver con el uso de la palabra “género”. Los legisladores resolvieron aprobar el texto de la Comisión de Legislación que suprimió esa palabra.
Además se logró la mayoría para eliminar la figura de la conciliación entre víctima y victimario. Con lo cual la mujer víctima de violencia ya no estará obligada a conciliar con su agresor en ninguna instancia.
Durante el debate, y en su estilo particular, el senador oviedista José Manuel Bóbeda fue uno de los que argumentó que la palabra género se prestaba para ambigüedades. Señaló que las personas nacen hombres y mujeres, y las personas “trans” pueden valerse de ella, siendo que la normativa es para favorecer a las mujeres.
Asimismo, Bóbeda peticionó que se elimine el punto que hace referencia a los métodos anticonceptivos, como una forma de libre opción para las mujeres, pero no logró mayoría. Pidió que se deje constancia de su postura en rechazo porque atenta contra la vida.
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El colectivo “Mujeres libres de Violencia” del Paraguay envió una Carta abierta a senadoras y senadores del Paraguaya con el siguiente título: “Por la vida de las mujeres y niñas del Paraguay”
En la misma expone que «la palabra género está incorporada en el Estado, tanto en políticas públicas como en diversas instancias, así como también en los compromisos asumidos por el Paraguay en convenios y mecanismos internacionales», instando a los legisladores a votar por un proyecto que incorporara esa palabra
«Porque el género es efectivamente una construcción social pues refiere a los roles asignados culturalmente a mujeres y hombres. No es una ideología en el sentido que le dan sectores conservadores de la sociedad que con esta falacia buscan imponer en la ley creencias arcaicas, perimidas y que rechazan abiertamente la igualdad entre mujeres y hombres pues quieren mantener a las mujeres subordinadas, sumisas, dominadas, manteniendo así la desigualdad de derechos y la discriminación que están prohibidas por la Constitución Nacional».
«Porque sin la mirada analítica que permite el género no se podría entender ni comprender por qué más del 95% de las víctimas de violencia sexual, doméstica, en las relaciones de pareja, son mujeres y niñas, y los agresores son en inmensa mayoría hombres que creen tener el privilegio de maltratar, agredir, abusar sexualmente, violar e incluso asesinar a mujeres».
Mayor información con Myrian González del Centro de Documentación y Estudios (CDE)
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