Tras la primera ronda de reuniones para la revisión del Anexo C de Yacyretá, referentes de la delegación paraguaya manifestaron que las negociaciones “van por buen camino”; aunque, a juzgar por los resultados obtenidos hasta ahora, todo va dirigido a favorecer las pretensiones argentinas de concretar las nuevas obras, dejando de lado la solución a la crítica situación financiera y económica de la entidad.
Prueba de ello es que, de todos los puntos abordados en las reuniones en Buenos Aires, solo se llegó a un acuerdo “técnico”, que fue la reactivación del Comité de Comercialización encargado de coordinar y reglamentar los servicios de electricidad de la EBY.
En cuanto a la reestructuración de la deuda de la entidad, el incremento de la compensación por cesión de energía, además del pago por territorio inundado, que son los puntos considerados vitales para el Paraguay, quedaron pendientes de resolución, ya que la delegación argentina solicitó un cuarto intermedio hasta el próximo martes 24, en que volverán a reunirse las comisiones en Ayolas
Tampoco hubo una definición sobre el reclamo de la gestión paritaria en la EBY. Este hecho incluso apresuró el retorno del jefe de Gabinete de la Presidencia, Juan Carlos López Moreira, quien desde un principio defendió la posición de condicionar la realización de nuevos proyectos al arreglo previo de la situación financiera y administrativa de la entidad.
Según las versiones, todo apuntaría a que la respuesta argentina se dilate indefinidamente, tal como ocurrió en 2011, cuando se elevó la cota sin que ese hecho haya sido aprovechado por el Gobierno (de Paraguay) para exigir una solución definitiva a los problemas que arrastra la binacional.
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