El presidente Fernando Lugo no tiene necesidad de pedir permiso del cargo para dedicarse completamente al tratamiento del cáncer linfático que lo afecta porque «reacciona favorablemente a la quimioterapia», dijo el lunes Alfredo Boccia, uno de sus médicos.
El mandatario no asistió al palacio de Gobierno y atendió los asuntos oficiales en su residencia porque las defensas de su organismo están debilitadas tras la segunda quimioterapia del viernes último, según se explicó.
Salvo la caída de cabello, el Presidente no tiene problemas para gobernar. Incluso, como médicos que somos, le pedimos que realice sus actividades normalmente salvo contactar con muchas personas para evitar alguna infección», explicó Boccia a los periodistas.
El general retirado Lino César Oviedo, líder del opositor partido Unace, solicitó a Lugo la semana pasada dejar el mando del país en manos del vicepresidente Federico Franco y dedicarse a su tratamiento.
Boccia añadió que «el cáncer linfático no Hodgkin de baja malignidad eventualmente podría llegar al sistema nervioso central, pero aún así existe tratamiento. Pero no es el caso del Presidente».
«Dentro de dos semanas resolveremos sobre el viaje de Lugo al Hospital Sirio Libanés, de Sao Paulo, para someterse a una evaluación médica y es probable que allí reciba la tercera de la seis sesiones de quimioterapia establecidas como tratamiento», acotó el médico.
En tanto, Marcos Fariña, defensor de Lugo en un juicio por presunta paternidad irresponsable, informó que «el 24 de septiembre llegará de un laboratorio de Estados Unidos el resultado de un tercer examen de ADN».
«Los dos anteriores resultados dieron negativo, es decir el Presidente no es el padre del niño que la mujer Hortensia Damiana Morán dice haber concebido con mi cliente, según esos dos estudios», especificó.
Lugo reconoció como suyo en 2009 al niño Guillermo Armindo, de casi tres años, nacido de su relación con Viviana Carrillo.
Un segundo reclamo judicial por filiación presentada por Benigna Leguizamón fue dejada sin efecto por ella misma, aparentemente tras arribar a un acuerdo extrajudicial con el jefe de Estado
