El Estado Paraguayo sigue cumpliendo lo establecido en la Ley N° 838/96 –y modificaciones sucesivas- «Que indemniza a víctimas de violaciones de Derechos Humanos durante la Dictadura de 1954 a 1989»
Esto se hace viable a través dos organismos: la Defensoría del Pueblo cuyas funciones son la defensa de los derechos humanos, la canalización de los reclamos populares y la protección de los intereses comunitarios y el Ministerio de Hacienda que ejecuta el pago efectivo del monto indemnizatorio en su condición de administrador del patrimonio y el proceso presupuestario del Estado.
Desde enero del año 2013 a la primera quincena de abril de 2015, las resoluciones de otorgamiento del beneficio han sido más de 2600. Vale aclarar que los reclamos pertinentes ya han caducado en mayo de 2009 -aunque el derecho a peticionar que pudieran tener las víctimas debería ser imprescriptible- la demora en la percepción se debe a la inmensa cantidad de solicitudes y a la investigación exhaustiva que se debe hace de cada caso particular.
El mes pasado, este medio de prensa ha sido testigo de un acto de entrega en el edificio del Ministerio de Hacienda de los cheques respectivos a las víctimas y observamos el trato preferencial dado a una señora de 93 años en silla de ruedas que pudo cobrar en vida.
Debemos destacar la rapidez, eficiencia y la amabilidad conque los funcionarios realizaron la gestión, de los cuales hemos registrado la identificación de solamente tres de los seis –ver foto- que estaban atendiendo al público: ellos son el Dr. Héctor Fernández, la Lic. Maricel Leiva y el Lic. Marcelo Gavilán.
Una nueva generación de brillantes profesionales con vocación de servicio.
(Esperamos que algún lector nos informe los nombres de los tres restantes que no nombramos).
Si van a recompensar a todos los dannificados por la revolución y la dictadura, debiera ser a todos nosotros los opositores al entonces partido Colorado, que ya sea por se Liberal o Febrerista nos destituian de nuestros puestos, cerraron nuestra escuelas en San Juan Nepomuceno, interrumpieron nuestros estudios, que con esfuerzo nuestros padres, la mayoria veteranos , nos estaban proporcionando, los saqueos de que fuimos victimas, las amenazas (a mi) de violación, escaparse encerrada en el baño del tren para poder venir a la Argentina y desde alli mandarle la mitad de mi sueldo a mis padres para sostener a mis 5 hermanitos, porque a mi padre le quitaron el trabajo. En San Juan vi a mis compañeros del Centro de Estudiante, (el Presidente ) morir atado a dos mulas que los despedazaba, mientras que las damas del partido Colorado los apedreaban, bueno ,,,es indiscriptible la crueldad y el odio con que un pueblo hermano de repente se manifestó en el Paraguay .Estas son un poquito de la gran drama que hemos vivido en aquel tiempo . No quiero ninguna recompenza, solo quiero que el pueblo aprenda de sus errores, que evolucione sus vajos sentimientos y basta ya de gobernantes ignorantes llenos de sus gran egos y pasiones. Talvez yo le sugeriria al ex gobernante del Uruguay que venga a dar una clase de civismo a todos los candidatos del gobierno en el Paraguay. Juana Pueblo y sus hijos (extranjeros)