Parece que al primer equipo fútbol del Club le agarró una epidemia de mala suerte, ya que hasta el momento no da pie con b…alón.
Tanto es así que a poco más de un mes de iniciarse el campeonato tuvo que cambiar todo su equipo técnico: menos mal ocurrió ese cambio porque hoy, 13 de octubre, logró empatar con Central Ballester, jugando de local en la cancha de Liniers.
El punto logrado sumó al otro punto que tenía y ahora suma dos puntos –en seis partidos jugados- que aún mantiene al equipo guaraní en la decimoquinta posición entre 15 clubes que participan en la divisional.
Ubicación que no puede imputarse a la gestión de la Comisión Directiva y a sus colaboradores que pusieron -siguen poniendo- todo lo que hay que poner para mejorar el desempeño futbolístico. Esfuerzo, dedicación y recursos que hasta el momento no tuvo los resultados positivos esperados.
A grandes males, grandes remedios… Por eso dijimos que el Deportivo necesita una sanación urgente, un toque mágico o un payé que le saque del encantamiento maldito y sobrenatural que algo o alguien le echó encima para perjudicarlo.
Deseamos informar muy pronto sobre la curación de este sortilegio maléfico
